El derecho a no escuchar
Me estaba preparando
esta mañana para escribir nuevamente sobre
el tema que dejamos
pendiente hace algunos
meses, que se refiere a ritmos musicales, sus raíces y sus características, sin
embargo, un video que recibí de mi gran
amigo Oscar Burgos (comediante, imitador y conductor) me hizo cambiar de
opinión.
En el video Oscar entrevista al músico Alex Syntek y le pregunta acerca de
los corridos tumbados, bélicos y similares. En lo personal, esa música no es
de mí agrado, al igual que el reggaeton,
simplemente por su lenguaje vulgar,
violento y altanero.
Pero, por otro lado, estoy también
convencido de que se deben y se tienen que respetar los gustos de cada
persona, ya que cada quien es libre de
escuchar lo que quiera, de producir la
música que quiera y de opinar lo que
le dé la gana. A eso se le llama libre
expresión, y es algo muy valioso que
nunca debemos perder.
Lo anterior me hizo también reflexionar sobre algo muy importante: así
como los fumadores tienen derecho a
fumar, y los no fumadores tiene el derecho a que se les respete su espacio libre
de humo; nosotros tenemos el derecho
de no escuchar la música que no es grata
para nuestros oídos, respetando sitios
y lugares familiares, como escuelas y
lugares públicos. Por lo tanto, no es
correcto que se invada nuestro derecho a no escuchar vulgaridades hacia
la mujer o narco-corridos.
En ocasiones, me ha tocado asistir a
algún restaurante familiar donde como
música de fondo se escucha reggaeton
o alguna canción bélica con líricas no
aptas para todo el público (OJO, no me
asusto, ni soy un persignado), algo que
no es correcto. ¿Porqué? Porque hay que
respetar a las niñas, niños, adolescentes, adultos mayores y familias que no
pudieran estar de acuerdo con escuchar
eso. La verdad, no me gustaría llegar con
mis padres a algún restaurante y que
ellos escucharan esas cosas. El respeto
al derecho ajeno es la paz, aplicando lo
anterior también a la música.
Otro ejemplo que me gustaría darles,
es el del vecino ruidoso, aquel que no le
importa ni el día ni la hora, para poner
su estéreo a todo volumen, mientras la
gente quiere descansar. No nos pueden quitar nuestro derecho a no querer
escuchar la música que ellos quieran a
todo volumen.
En resumen, creo que cada quien
puede escuchar lo que quiera, cuidando
siempre el no invadir los espacios personales de las otras personas.
Y los dejo, porque ya me voy a escuchar a Peso Pluma.
Email: victororduna@hotmail.com
Instagram: victor.orduna
Músico y
compositor regiomontano, que
desde muy joven incursiona en el
ambiente artístico como músico y
actor. Ha formado parte de bandas XO,
Conspiración, Contraste, Cherokee y
actualmente Coyote Rock Band