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¿Qué buscan los jóvenes
en las artes?
¿Será que aún no hemos entendido las necesidades reales
de nuestros adolescentes?
En nuestro país, al igual que en muchos otros de Latinoamérica, existen
diversos problemas que dificultan
el acceso de la gente, incluidos los
jóvenes, a las artes. Y si a esto le
sumamos, que muchas de las propuestas artísticas actuales no crean
una “conexión real” con el mismo
adolescente, entonces la brecha
aumenta todavía más.
Pero empecemos por el poco acceso que tienen los jóvenes a las artes.
¿Por qué es tan limitado?
Primero, debido a la falta de educación artística en el sistema educativo de México y de muchos otros
países de Latinoamérica. A pesar
de los esfuerzos realizados para promoverla, existen todavía muchas
deficiencias en la inclusión, cantidad y calidad de los programas
de arte en las escuelas públicas, lo
que limita las oportunidades de los
jóvenes para descubrir y explorar
su creatividad y talentos artísticos.
Segundo, debido a la falta de infraestructura cultural en muchas zonas,
al igual que a la falta de recursos
para el desarrollo de actividades artísticas. Un punto que, sin duda, no
necesita amplia explicación para
ser entendido. Si no hay dónde ni tampoco
dinero, pues difícilmente las actividades culturales podrían llevarse a cabo.
Tercero, debido a las limitaciones económicas
de muchas familias, que les impiden el acceso a
clases, talleres y eventos culturales. Limitaciones
que no se reflejan solo en el costo del evento o
taller, sino en los costos de trasporte y materiales,
al igual que en el costo de oportunidad del joven,
que, al hacer alguna actividad artística, deja de
hacer algo en casa, que pudiera beneficiar a
su familia de otra forma.
Sin embargo, existe una causa quizás más importante que las anteriores, que dificulta cada vez
más el acceso de los jóvenes a las
propuestas artísticas; siendo esta,
la que se refiere a que no se está
conectando con las necesidades
reales del adolescente. Digamos
que lo que ellos buscan, no necesariamente lo están encontrando
en lo que ya existe.
Explicó: Hace algunas semanas,
tuve la oportunidad de charlar
con la joven guitarrista y cantante
estadounidense Emi Grace, una talentosa chica de 21 años, que está
conectando de manera importante
con los jóvenes, a través de una propuesta musical distinta, basada en
el amor y la honestidad, tanto en la
composición, como en la interpretación de su música.
Algo importante que ella mencionaba, es que además de la preparación y el trabajo duro, era necesario
ser auténtica, coherente y muy honesta en la forma en cómo te presentas y en lo que ofreces al público
joven. Los nuevos públicos exigen
que el artista sea coherente y que
verdaderamente sea sincero con lo
que está presentando, mostrando
amor por lo que hace durante todo
el proceso creativo.
Si lo anterior lo extrapolamos a las demás artes,
creo que la charla con Emi Grace, al menos nos
haría cuestionarnos, si nuestra estrategia para
llevar el arte a los jóvenes es la correcta o no.
¿Será que aún no hemos entendido las necesidades reales de nuestros adolescentes?
robgarza@att.net.mx