Somos arquitectos
de nuestra realidad
El proceso de convertirnos en arquitectos de
nuestra realidad, no es otra cosa más que el
despertar del genio de nuestra conciencia interior.
Recientemente, leí
un artículo sobre
u n t e m a mu y
interesante respecto a los “bucles
de tiempo”, y me di cuenta de
que ese tema aún no está muy
claro en el ámbito científico,
pues su origen se mueve en el
misticismo omnisciente de la
mente. Sin embargo, si partimos de que somos arquitectos de nuestra propia realidad,
sería posible que bajo ciertas
condiciones, estos si pudieran
ser creados fuera de las leyes
físicas del tiempo y espacio,
aunque generalmente suelen
pasar de manera inconsciente,
por alguna situación aún sin
resolver en un ámbito difícil
de comprender.
Lo cierto es que cada decisión que tomamos momento a
momento, define nuestro destino, y a su vez internamente
en el cerebro se crean miles de
circuitos neuronales en forma
de algoritmos biológicos; así
como una serie de procesos
holográficos complejos, que
serían los responsables de
proyectar la manifestación
que llamamos realidad. Por
lo general, todo es manejado
por el subconsciente, a menos
de que encontremos la manera
de cómo llegar a nuestro propio “arquitecto interior de la
realidad”, con la ayuda de la
conciencia absoluta que es
Dios.
El proceso de convertirnos en arquitectos de nuestra
realidad, es el despertar del
genio de nuestra conciencia
interior. En la antigüedad,
le llamaban estar en estado
de gracia, que no es otra cosa
que tener coherencia, certeza
y conciencia. Esto podemos
iniciarlo, cuestionando en
todo momento lo que estamos haciendo, al igual que al
estar solicitando información
a la conciencia absoluta, para
la toma de buenas decisiones.
Es algo similar a estar en un
internet cuántico, donde todos
estamos conectados en tiempo
real, independientemente de
la parte del universo donde
estemos, ya que no afecta el
tiempo ni el espacio.
Desafortunadamente, con el
uso de las redes sociales, nos
hemos hecho más adictos a
las aplicaciones tecnológicas,
que nos tienen en una inteligencia artificial que ha ido
ganando terreno en la toma
de nuestras decisiones. De
cierta forma, hemos permitido
que nos esté estudiando y en
base a esa información, esté
desarrollando algoritmos para
tenernos cautivos indefinidamente; de tal suerte que nuestra conexión con la conciencia
absoluta ha ido perdiendo
fuerza debido a la interferencia de estos medios artificiales.
En resumen: nuestra realidad
estará intervenida mientras
nosotros así lo permitamos.
La clave para dejar esta
adicción tecnológica, es evitar depender tanto de ese
tipo de aplicaciones. Debemos evaluar y conservar sólo
aquellas que nos ayuden a ser
productivos y nos permitan
tener más tiempo para estar
con la familia. El poder de las
decisiones importantes, siempre debe estar en las manos de
uno mismo.
Tener el correcto balance
de tiempo en el que buscamos
información y desarrollamos
algo para un bien común, es la
clave para saber que la tecnología es una herramienta para
optimizar recursos. Nuestra
conciencia absoluta será quien
nos guíe siempre y de manera
diaria, por medio de información. Y será así, que a través de
esa conexión nos convirtamos
en los arquitectos de nuestra
propia realidad.
Luis González “Lugi Goga” ing.luis.gonzalez.g@gmail.com
Ingeniero Civil con especialidad
en Desarrollo e Innovación
Empresarial por el ITESM. Ha
participado en diferentes
proyectos con base en
ingenierías de valor y optimación
de procesos.