Por:
Irma Idalia Cerda
Fotografía:
Especial
Las amazonas del siglo 21
Son verdaderas guerreras, victimas de la violencia, que
seguirán luchando y clamando justicia, sin dejarse vencer por
nada ni por nadie.
En las últimas semanas, hemos
estado consternados por
noticias que han involucrado
a mujeres: el feminicidio de
Abril, víctima de violencia
física por parte de su marido a quien
luego de haberlo denunciado y pedirle
el divorcio, fue ejecutada en la Ciudad
de México, cuando le dispararon en el
automóvil en el que viajaba junto con
sus hijos.
Posteriormente, todo México estuvo
al pendiente de Karen, quien le había
enviado mensajes de WhatsApp a su
madre, en la que le manifestaba su
temor por el comportamiento del
taxista, y el resto ya lo sabemos : ella
regresó a su casa sana y salva, pero en
las horas que se desconocía su paradero,
la joven estaba en un bar, según videos
que circularon por las redes sociales.
Esto provocó una división de opiniones, cada vez más comunes en nuestra
sociedad, en las que las mujeres por lo
general salimos perdiendo. Y me refiero
a que siempre seremos señaladas, criticadas, menospreciadas, ridiculizadas
y sobre todas las cosas : culpables.
Pero, si hablamos de culpa ¿quién no
escuchó el himno creado por un colectivo feminista chileno que se hizo viral
y todo el mundo entonó: “ Y la culpa
no era mía, ni donde estaba ni como
vestía” ?
Esta estrofa ha hecho eco en miles
de mujeres que han sido víctimas de la
violencia y abuso sexual, la mayoría a
muy temprana edad, y estoy segura que
al corear estas afirmaciones al lado de
tantas mujeres en una marcha, definitivamente las empodera, las fortalece
y las dignifica.
Pero claro, no falta quien o quienes
las tachen de locas, de exageradas, de
“marimachas”, pero lo más triste, que
se burlen de sus manifestaciones. Me
inclino a pensar que los que no comulgan con este movimiento, no tienen idea
acerca de las secuelas que deja haber
sido víctima de abuso sexual o no tienen
hermanas, primas o hijas que hayan
sido asesinadas o violadas.
Esta falta de empatía ha provocado una mayor furia, o “ira” en estas
mujeres, que han tenido que llegar a los
extremos precisamente para ser vistas
y escuchadas ; para gritar por las que su
voz se ha apagado, para denunciar que
todos los días violan y matan mujeres,
y que mientras esto siga sucediendo,
ellas estarán ahí para recordárnoslo.
Que algunos piensan que no es la
mejor forma de proceder, pero también
es cierto que ya intentaron hacerlo de
manera distinta, pero las ignoraron
olímpicamente.
Hace tiempo una chica bailó por las
mujeres víctimas de la violencia, pero de
inmediato se burlaron de ella, así como
el performance de protesta “Un violador
en tu camino” que ha sido replicado
en la Ciudad de México, Bogotá, París,
Londres, Nueva York y hasta en Estambul, también ha servido para hacer una
parodia como la que hicieron los jugadores del Club América Sub-17, sólo
por mencionar un ejemplo.
Es por eso y muchas razones más
que estás mujeres seguirán luchando
y clamando justicia. Yo las veo como
las amazonas, las guerreras que se
enfrentaban a los soldados griegos con
gran valentía y honor. Creo que estas
mujeres feministas son las amazonas,
del siglo 21 , las que no se dejarán vencer
por nada ni por nadie.
irma_idalia@hotmail.com